La Asociación Mundial de Medicina del Sueño estableció en 2008 el tercer viernes de marzo como el Día Mundial del Sueño. El propósito de conmemorar esta efeméride es recordar a los habitantes de todo el planeta la importancia que las horas de descanso y sueño profundo tienen para la salud del ser humano.
Al celebrarse este 15 de marzo la referida fecha, especialistas del Instituto Peruano de Neurociencias señalaron que dormir tarde y poco acelera el envejecimiento en el ser humano. Advirtieron que este hábito “es una bomba de tiempo que a la larga atenta contra nuestra salud”.
“El sueño es una necesidad biológica que permite recuperar funciones físicas y psicológicas para el pleno rendimiento de las personas. Por ello, es importante no renunciar al valioso tiempo del sueño para completar las tareas del día siguiente”, manifestó el neurólogo y director del IPN, Nilton Custodio en un informe publicado por el portal Perú 21.